¿Qué les puedo decir? hoy, todo se trata de aprender a soltar . Sí, soltar, esa palabra que he escuchado más que nada en este último añ...

Soltar

11:34 Aynoa Morán 4 Comments


¿Qué les puedo decir? hoy, todo se trata de aprender a soltar. Sí, soltar, esa palabra que he escuchado más que nada en este último año, de la que no me quise hacer muy amiga, pero poco a poco, entre regañadientes se tuvo que convertir en una de mis pequeñas filosofías de la vida. “Hay que soltar” me dicen los posts de Instagram que veo todos los días en las cuentas de frases empoderadoras que juro me hablan de cada uno de mis problemas. Y yo las leo y reflexiono y les contesto, que claro que quiero soltar, pero es que nadie te pone el pequeño manual de cómo hacerlo sin que en el camino se te vacíe un poquito el alma. Y es duro, lo es.
Por su puesto que soltando te haces más fuerte y aprendes de los errores y sales al mundo con ganas de hacerlo todo, pero al mismo tiempo te va quedando una pequeña marquita por dentro que te hace tener un poco de miedo de volver a aferrarte a nada, miedo a quedarte en un lugar por mucho tiempo y acomodarte, porque no sabes cuándo te toque volver a, sí… soltar.
Sigo aprendiendo a hacerlo, no lo voy a negar, de hecho, luego de todos estos meses que siento que me he pasado soltando cosas como loca, estoy segura de que sigo en nivel amateur/principiante/for dummies porque no, no es nada fácil. Es que a veces la mente divaga y te hace olvidar de los arduos procesos y cuando menos te das cuenta ya te estás encariñando de nuevo con esto o aquello y pum llega la hora de dejar ir y no sabes qué mismo está pasando y te toca hacerlo, te toca llenarte de valor o del sentimiento que sea para desempolvar los archivos y recordar cómo mismo es que tienes que soltar. 
Deberás, sea como sea, hacer reset, o formatear la máquina y borrar de golpe un montón de cosas que te dan vuelta en la cabeza, sin pensarlo mucho, ojos cerrados y un solo dolor. Deberás armarte de valor y lograr arrancarte ese diente de leche que ya está sueltito pero que se niega a irse porque de alguna manera extraña no quiere caer y además tú ya te has acostumbrado a ese placentero dolor que aparece cuando lo mueves con la punta de la lengua. Deberás empezar nuevas convicciones, rituales y costumbres, que incluyan verte fijamente en algún espejo y decirte lo mucho que lo vas a lograr, porque sea como sea lo vas a lograr (¿verdad?).
Deberás rodearte de mucha gente que esté dispuesta, día a día, a decirte que esto es lo mejor y que esto también pasará y que no olvides que eres una amazona independiente y fuerte, diosa del Olimpo que conseguirá cualquier cosa que se proponga. Son ellos los que te mandarán el mensaje cada día recordándote eso y más y se calarán tu llanto espasmódico, el feo, el raro, el inefable y además todo el bla bla bla que quieras sacar, un trabajito.
¿Qué más les puedo decir de todo esto? Suelten, sí suelten, pero no tengan miedo de volverse a aferrar, ni de seguir a esa otra vocecita que les dice que lo hagan, que se instalen en algún lugar, que se agarren con todas las fuerzas y que estén all in, temblando pero arriesgando, porque yo creo que eso es los que nos hace sentir de verdad, esas ganas que no las cambiaría por nada, ni por devolver todas las lágrimas regadas, ni por no recuperar todas esas horas de sueño, nada.
Ahora que me toca soltar una vez más, respiro con fuerza, desempolvo y recuerdo los pasos exactos y las instrucciones sabias, esas que ya me funcionaron una vez, esperando a que las cosas pasen, así como todo pasa.

4 comentarios:

  1. Para soltar, primero hay que arreglar el cuarto por 56 minutos exactos. Luego todo se vuelve más fácil.

    ResponderEliminar
  2. A mi me encanta darlo todo, aun sabiendo que me puede doler o que puedo ganar a una persona toda mi vida.
    Es como un reto :daré todo para ver que pasa, wujuuu!
    Y voy analizando todo el tiempo y digo mmm parece que esta relación va por buen camino o digo oh oh! Es hora de abandonar.
    Cómo te dije en tu última publicación, soy nura en esto de los blogs pero me ha encantado leer el tuyo, el de alguien que conocí en una etapa de mi vida (te hiciste mi amiga porque tenía el cabello hecho una mierda) , luego me aventuraré al de otras personas! Sigue publicando, porque estoy segura de que sigues escribiendo ☺️

    ResponderEliminar