Pareciera que cada año es una acumulación de pequeñas cagadas , sí. Pero no, no nos adelantemos no son necesariamente todas malas, algu...

¡Qué cagada!

10:24 Aynoa Morán 0 Comments


Pareciera que cada año es una acumulación de pequeñas cagadas, sí. Pero no, no nos adelantemos no son necesariamente todas malas, algunas cagadas son buenas ¿o es que no han escuchado que si los caga una paloma es de buena suerte? Bueno pues, yo quiero seguirla cagando, porque así se me da. No quiero sonar cliché ni nada, pero he aprendido mucho así, cagándola, haciendo todo lo que me ha dictado el instinto, la tripa, o siendo honesta, siguiendo las ganas de ver qué pasa. De broma en broma he sobrevivido.
Y aunque muchos me viven diciendo que no la cague, o que por qué la cagué, si todo me iba tan bien así o asá ¿qué les puedo decir? Yo escucho todos los consejos que me dan: los jóvenes, los viejos, los más sabios, sobre todo mi papá; escucho porque hay que aprender a escuchar, y hay que analizar y escoger con lo que nos queremos quedar. Yo lo he intentado de todas las formas; he sido atenta, alerta, cautelosa, me he lanzado de una, he sido impulsiva, he aplicado la de recatada, la de bacán, todo, al final siempre la cago, pero esa también ha sido la parte genial.
Y es así, hay que aprender a vivir con las cagadas que cometemos, embrace them, porque son parte de lo que somos y nada las borra mágicamente. Hay que aprender a hacerse bolita y a llorarlas (si son del team llanto, como yo), o a matarse de risa y atisbarlas de vez en cuando, para no regresar a ellas. 
No, esto no quiere decir que vamos a ir por la vida de cagada en cagada, no, esto quiere decir, tal vez, que podemos atrevernos a hacer lo que nos hace sonreír de más, a apostarle a las felicidades efímeras, porque no sabemos con certeza cuánto duran las cosas (ya sean buenas o malas). No sabemos, aunque nos matemos tratando de buscar las señales que nos den todas las respuestas, y le dedicamos horas, días, la vida entera a darle significado a todo, a darle un sentido, que muchas veces no tiene nada de real. 
A veces pasa, y hay que dejarlo pasar. Los planes se vienen abajo, las cosas no son lo que parecen, la gente decepciona, unos se llegan a quedar, algunos van dejando marca, otros nos quieren mal, pero igual los queremos de vuelta. La gente no es eterna, nos enteramos tarde, lastimamos adrede o sin darnos cuenta, nos importa mucho, o a veces muy poco, nos pasamos de la cuenta, o no expresamos nada, estamos hechos de cagadas, pero es normal, solo hay que saber cuándo es suficiente y dejarla de cagar.
En lo personal, este año ha sido mucha mierda, de la que me han quedado incontables aprendizajes, cicatrices, fantasmas. A estas alturas no me queda más que pararme de nuevo y ponerme a limpiar el desastre. No me quejo, la vida es esto y está bueno.

¿Vamos por una cagada más?

0 comentarios: